Ha sido un placer servirles en nuestro restaurante en La Latina en Madrid. Nos sentimos agradecidos de haber sido uno de los lugares más populares para comer en el barrio, gracias a su apoyo y preferencia.
Lamentablemente, hoy nos toca decir adiós. Pero como siempre hemos dicho, los sueños no se cancelan, solo se posponen. Esperamos que en un futuro no muy lejano podamos volver a encontrarnos.
Por ahora, queremos invitarlos a seguir apoyando a los emprendedores venezolanos que estarán tomando el relevo en la calle del Almendro, 22.
Les agradecemos de nuevo por habernos permitido ser parte de sus momentos especiales y por dejarnos servirles. Hasta pronto.
¡Gracias mil gracias!